Los sillones de madera individuales, sillón camastro, sillones de un cuerpo de madera o camastros con almohadones, seguramente habitarán en el exterior, a veces protegidos por un quincho o por el alero de una galería, manteniendo sin duda un profundo diálogo decorativo con el mobiliario del interior, como lo marcan las últimas tendencias de la decoración, logrando continuidad e identidad de lenguaje, entre ambos ámbitos. Para que esto sea posible deberemos elegir las maderas que vistan el interior y resistan el exterior. Después de una trabajosa selección, optamos trabajar con el cedro, el incienso, la teka o el lapacho, porque poseen un color y una veta fina de gran belleza, que jerarquiza el interior, a lo que se le agrega una alta compacidad interior, lo que les brinda resistencia a los distintos factores climáticos como la lluvia y el sol intenso, lo que las hace aptas para el exterior.
Por otra parte, nuestros procesos de fabricación, nos permite cuidar artesanalmente todos los detalles de terminación y estructurales, además del acabado superficial de lustre a la laca que les aplicamos, lo que protege al sillón y realza la belleza de la madera.